
El ministro de Defensa de Finlandia, Antti Hakkanen, ha celebrado la entrada en vigor de una nueva ley que prohíbe a ciudadanos rusos y bielorrusos la compra de bienes inmuebles en su país. “Se trata de una reforma importante que se ha postergado durante demasiado tiempo”, ha valorado.
La medida, basada en cuestiones de seguridad, ha entrado en vigor este martes 15 de julio, después de que fuera aprobada ya por el Parlamento el pasado 11 de abril, aunque ha estado en la agenda de Helsinki desde finales de 2024
“Creo que la necesidad de esta reforma ha existido desde hace mucho tiempo, incluso antes de la invasión rusa de Ucrania. Por alguna razón, no se reconoció antes y no se puso en marcha la elaboración de una legislación”, ha dicho en su cuenta en la red social X.
Hakkanen ha aprovechado la ocasión para criticar al anterior gobierno y ha explicado que cuando asumió el liderazgo de la cartera de Defensa consideró una “desventaja” no haber actuado antes de esta manera.
“Me complace enormemente que esta ley finalmente se haya aprobado y entrado en vigor. Su objetivo es reforzar la seguridad de Finlandia y preparar al país para cualquier tipo de influencia”, ha celebrado.
Por otra parte, la Campaña Internacional para la Prohibición de las Minas Terrestres (ICBL) denunció este lunes la notificación formal de Finlandia a la ONU sobre su retirada del Tratado de Prohibición de Minas (en vigor desde 1999), una medida que calificó de “vergonzosa” y que “desafía la lógica militar y los valores humanitarios”.

Finlandia tomó esta decisión hace algunos meses -que recién ahora formaliza tras la aprobación de su Parlamento- en el contexto de la guerra de Ucrania y de la amenaza que ve en Rusia.
“Esta medida supone un cambio radical en el apoyo que Finlandia presta desde hace tiempo al desarme humanitario y al derecho internacional, y alinea al Ejército finlandés con las prácticas de Estados como Rusia y Corea del Norte”, sostuvo la organización civil que defiende la causa de la prohibición absoluta de las minas antipersona.
De acuerdo con los plazos establecidos en el propio tratado, la retirada de Finlandia entrará en vigor en seis meses, periodo durante el cual también puede retractarse.
El ICBL recordó que el consenso internacional reconoce que las minas antipersona “no deben utilizarse nunca”, por ser armas que causan un daño indiscriminado, que no pueden dirigirse contra un objetivo enemigo y acaban matando y mutilando sobre todo a civiles inocentes incluso años después de terminado un conflicto armado.
(Con información de Europa Press y EFE)