
La campaña electoral en la Ciudad de Buenos Aires se encuentra en una etapa decisiva, marcada por la expectativa de que el PRO logre asegurar la banca de su sexta candidata, Antonela Giampieri, y por la confianza en que Patricia Bullrich obtendrá una victoria clara. Así lo expresó Fernando de Andreis, candidato a diputado nacional por La Libertad Avanza, quien afirmó: “A nivel nacional va a ganar La Libertad Avanza y en ciudad vamos a ganar bien”.
De Andreis habló en Radio Rivadavia y subrayó el aprendizaje que dejó la última contienda, en la que, si bien La Libertad Avanza se impuso, el margen obtenido no resulta “suficiente para un gobierno no peronista”. El candidato a diputado sostuvo que, tras semanas de campaña compleja, se percibe una reconexión con el electorado, lo que genera optimismo en el tramo final.
El dirigente del PRO también abordó el clima político nacional y señaló que la elección del domingo representa una disyuntiva fundamental para el país: “Esto es una elección binaria y trascendental y hoy, lamentablemente, creo que los veo con el cuchillo afilado al peronismo”.
También indicó que, en estos comicios, se decide entre avanzar con las reformas propuestas por el presidente Javier Milei —como la tributaria y la laboral, orientadas a reducir impuestos, litigiosidad y empleo informal— o retroceder hacia un escenario similar al de 2019, con el regreso del kirchnerismo. De Andreis advirtió que la dispersión del voto, ya sea por optar por terceras fuerzas o por la abstención, favorece el retorno de ese espacio político.
En relación con el rol del PRO en la nueva etapa, De Andreis manifestó que el centro de atención se trasladará al Congreso, donde será imprescindible construir una mayoría amplia para aprobar las reformas estructurales. “Para eso se necesitan 129 diputados”, enfatizó, y recordó que, como planteó el expresidente nacional Mauricio Macri en redes sociales, no basta con la suma del PRO y La Libertad Avanza, sino que será necesario articular acuerdos con otros sectores.
En este punto, el hombre cercano a Macri reconoció que el PRO no fue suficientemente escuchado durante el primer año y medio de gestión de Milei, pero consideró que ahora la responsabilidad es mayor y que la prioridad debe ser la recuperación económica y la restauración de la confianza.

El dirigente también reflexionó sobre la autocrítica interna del PRO y admitió que algunos aliados resultaron más cercanos a la agenda del kirchnerismo que a la de su propio espacio. “El PRO tiene que recuperar un poco el perfil liberal que teníamos”, afirmó, y puntualizó que es momento de tomar decisiones incómodas, pero necesarias para evitar que la Argentina siga postergando cambios. Y calificó como “murmullo socialista” a ciertas posturas internas y externas que, en su opinión, terminan favoreciendo el regreso del kirchnerismo y de Cristina Fernández de Kirchner.
Consultado sobre la relación con la actual ministra de Seguridad de la Nación y candidata a senadora, Patricia Bullrich, De Andreis estableció que existe un vínculo de larga data, y que, si bien se deben “una conversación”, el foco actual debe estar en trabajar en conjunto. “Para el 2027 faltan siglos en la Argentina. No es algo que me preocupe en lo más mínimo”, expresó, restando importancia a eventuales disputas futuras por la jefatura de gobierno porteña.
Respecto al vínculo entre Mauricio Macri y el exjefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, el dirigente del PRO descartó que sea irreconciliable. También confirmó que ambos mantuvieron encuentros privados durante el año, aunque reconoció que la decisión de Rodríguez Larreta de competir contra el PRO en la elección de mayo generó heridas profundas. “Son heridas que duelen y que va a costar sanar”, confesó.
Finalmente, De Andreis reiteró la importancia de acelerar las reformas y mantener la conexión con las demandas sociales, en un contexto que definió como difícil y desafiante. “La gente les está costando llegar a fin de mes, décadas ya de estancamiento, salvo algún periodo puntual”, subrayó. Y subrayó que la única vía para que la economía despegue es restaurar la confianza y avanzar en los cambios legislativos necesarios.