Una de las grandes preocupaciones que enfrenta el fútbol chileno es el difícil momento que atraviesa La Roja en las Eliminatorias Sudamericanas. Los dirigidos por Ricardo Gareca se ubican últimos en las clasificatorias y de perder contra Argentina en Santiago de Chile comprometerían todavía más sus posibilidades de lugar una plaza en el Mundial 2026.
“Si no clasifica, se la van a agarrar con los jugadores y con el cuerpo técnico. También, con todos los estamentos de la directiva. Sería muy duro para Chile no jugar otro mundial, el tercero consecutivo. A falta de cuatro partidos para el final, estar absolutamente eliminados sería lapidario y un fracaso”, sentencia el histórico ex centrocampista de la selección chilena Jorge Aravena Plaza.
El panorama actual del fútbol chileno no solo preocupa a los hinchas, sino que también pone en tela de juicio la capacidad de las instituciones deportivas para reflotar a una selección que, en otros tiempos, llenó de orgullo al país trasandino, y ganó dos Copas América consecutivas (2015/2016). Las críticas y presiones hacia jugadores como Carlos Palacios y Arturo Vidal se han convertido en un tema recurrente, aunque figuras históricas como Aravena reconocen el potencial joven y la necesidad de una visión estratégica sólida para construir el futuro.
“Lo que hay que hacer es reestructurar todo, definitivamente. Sigo sosteniendo que hay que reducir el número de futbolistas extranjeros en el campeonato local para qué los jóvenes chilenos tengan muchas más posibilidades de poder mostrar sus almas”, remarca el hombre de 67 años en diálogo con Infobae.
El Mortero Aravena, conocido así por su depurada técnica a la hora de ejecutar los tiros libres, nació el 22 de abril de 1958. Debutó con La Roja el 23 de junio de 1983, en un amistoso frente a la Argentina en Buenos Aires. A pesar de la derrota por 1-0, el ex volante se ganó un puesto en el equipo. Disputó 37 cotejos, marcó 22 tantos, convirtiéndose en el 8º anotador histórico. Participó en la Copa América 83, donde fue titular en los cuatro encuentros. Se despidió ante Brasil por la Copa Expedito Teixeira, en octubre de 1990. Tres años después, se retiró profesionalmente en el Audax Italiano, previamente a vestir las casacas de la Universidad Católica, Real Valladolid de España, Deportivo Cali de Colombia y Puebla FC de México.
Aravena es el chileno más goleador en un año calendario: en 1983 llegó a los 58 tantos oficiales (19 de tiro libre), jugando para la Católica. También, fue el máximo artillero en las Eliminatorias Rumbo a México 86 con 7 anotaciones, y participó además de las clasificatorias a Italia 90, y de la Copa América de 1983.
“Argentina es la favorita, no nos podemos engañar. Quiero que gane mi selección, pero uno debe ser objetivo. Hoy, estamos complicados. ¿Si firmo el empate? No nos sirve. Quiero que gane Chile”, sostiene el oriundo de la capital chilena.
- ¿Qué es de su vida, Jorge?
- Ahora estoy viendo mucho fútbol por todos lados. Observé las finales en Europa, y estoy esperando que salga trabajo, algún equipo para trabajar. Me apasiona mucho dirigir, me gusta mucho enseñar, así que estoy esperando la posibilidad nuevamente de estar en algún equipo
- ¿Siempre con ganas de dirigir en Chile o le abre la posibilidad a ir en otros países?
- No, no tengo ninguna dificultad de ir a otro lado, si es que me invitan a un buen proyecto. De Argentina nunca me llamaron. A mí me gusta jugar con línea de cuatro defensores. Evidentemente, con el portero y una línea de cuatro defensores. En el mediocampo, me gusta armar un rombo con un volante central y dos volantes externos, y un enganche detrás de los delanteros. Un delantero centro, y otro que se mueva bien por ambos costados. O dos delanteros centros dependiendo también de las cualidades y capacidades del rival.
- Durante su carrera, dirigió mucho en Chile y en México. Tiene casi 20 años de trayectoria como entrenador, pero mucho más de futbolista, ¿no?
- Ah sí, claro como jugador, empecé en la Universidad Católica y después estuve por Santiago Morning, Naval, Valladolid, y en Deportivo Cali de Colombia. Pero me encanta dirigir, me fascina, pero jugar al fútbol es una cuestión mágica. Hoy en día estoy en otra faceta ya, y el haber estado en todos los lugares en los que estuve, me encanta haber jugado en Santiago Morning, un equipo chico de acá de mi país. Ese año estábamos en la B, luego haber jugado en España en Primera División. También en Colombia, en un equipo importante por haber jugado Copa Libertadores. Ya había jugado la Libertadores con la Universidad Católica, luego de ir a México, ganar todo lo que se podía ganar en México. En Colombia, fui campeón y goleador, y en México gané todos los premios que puede ganar un futbolista, de manera individual y de manera colectiva. Fui campeón de todos los campeonatos que se organizaban en México en esa temporada.
-Estuvo en Deportivo Cali en un momento complicado de Colombia. ¿Lo sufrió?
- Socialmente Colombia estaba bien complicada, pero en los dos años en los que estuve jamás tuve problemas, con absolutamente nadie. Estuve en Cali, en una linda ciudad, hermosa.
- ¿Tiene una cuenta pendiente que es dirigir la Selección de Chile?
-Me gustaría mucho, ya que dirigí una selección Sub-17. Pero evidentemente en algún momento de mi carrera, me gustaría estar al mando de la selección Mayor. Sigo manteniendo la ilusión. Últimamente Chile o la Asociación de Chile elige técnicos extranjeros. A mí me gustaría que fueran técnicos chilenos. Pero bueno, la determinación la toma la Federación y no yo. En este momento, está Ricardo Gareca que lo conozco porque jugamos muchas veces en contra en Colombia. Él en América de Cali, yo en el Deportivo Cali. Venía de tener mucho éxito en la Selección del Perú, pero acá la cosa ha estado bastante floja, bastante mal. Está floja la selección de Chile de la mano de Gareca. Estamos al borde de la eliminación total.
- ¿Cómo caería en el pueblo chileno no asistir por tercera vez a un mundial?
- Sería nuestro tercer mundial consecutivo que no clasificaríamos. Es decir, no es culpa de Gareca, ya que en los dos anteriores mundiales tampoco habíamos clasificado. Nunca se buscaron alternativas para aquella generación tan ganadora, y hoy en día estamos pagando eso. Estamos viendo jugadores que van hacia la carrera, a ver si logran tener capacidades como para jugar en la selección chilena
- ¿Qué balance hace del periodo de Gareca?
- Imagínese que nosotros estamos dependiendo del siguiente juego que es con Argentina acá en Santiago, y si nos va mal, casi que nos quedamos afuera del Mundial 2026. Estamos fuera de todo. Lo que sería lapidario. A falta de cuatro partidos, estar absolutamente eliminados sería lapidario y un fracaso.
- ¿Cómo observa en la previa, el partido frente a la Argentina?
- Argentina viene de ser campeón del mundo, de la Copa América. Es una selección consolidada. Nosotros estamos recién buscando jugadores para consolidarnos a la selección. El campeón del mundo viene haciendo una gran clasificatoria y nuevamente ganaron una Copa América. Será complicado ese partido, muy difícil. Ahora, podría resultar que un resultado positivo, es decir ganar, le de ese empujón que necesita Chile para afrontar lo que resta, ese aire que necesita el equipo para enfrentar todo lo que viene por delante. Sería un tremendo envío anímico ganarle a la Argentina.
- ¿Y sino, será un fracaso rotundo?
- Sí, cómo no, un fracaso rotundo, porque sería el tercer mundial que no participa Chile. Lo que hay que hacer es reestructurar todo, definitivamente. Yo sigo sosteniendo que hay que reducir el número de futbolistas extranjeros en el campeonato, para que así los jóvenes tengan muchas más posibilidades de poder mostrar sus almas. Yo no estoy en contra de los futbolistas extranjeros, que quede claro. Yo fui futbolista extranjero durante siete años en cuatro países diferentes. De lo que estoy es contra es de aquellos que vienen y no aportan absolutamente nada.

- ¿Qué piensa que le está pasando a la selección de su país?
- Nos está pasando exactamente lo mismo que le pasó a aquella selección colombiana maravillosa, encabezada por el Pibe Carlos Valderrama. Los colombianos creyeron que iban a durar para siempre. Y cuando empezaron a retirarse ese brillante grupo de futbolistas, Colombia estuvo tres mundiales consecutivos sin ir. Pero aprendieron de la experiencia y hoy Colombia en cada partido aparece un jugador nuevo y tiene una selección muy fuerte, muy poderosa.
- ¿Este elenco chileno está para ganarle a la Argentina?
- Está complicado, evidentemente. Argentina es la favorita, no nos podemos engañar. Yo quiero que gane Chile, que gane mi selección, pero uno debe ser objetivo. Hoy, estamos complicados. ¿Si firmo el empate? No nos sirve. Quiero que gane Chile.
- ¿Le gusta lo que propone Gareca como entrenador de Chile o tampoco lo convence?
- Lo que pasa es que, a final de cuentas, la balanza que tenemos son los resultados y los resultados han sido malos. Claro. Y tuvo tiempo para trabajar, porque hace bastante que está en la selección chilena.
- ¿Cree que Arturo Vidal debe estar en la selección?
- Yo creo que Arturo fue un jugador brillantísimo, de una calidad técnica increíble. También, de una calidad física importante. Pero hoy en día, ya no está para la alta competencia, no está para para disputar un torneo internacional. Ya le está costando. Y lo veo más peleador en el campo de juego. Lo veo sobrepasado en la cancha. Empieza a discutir con los rivales, a pelear con el referí. Empieza a reclamarle a sus compañeros y se disminuye en cuestiones que no tienen nada que ver con el juego.
- En su momento, tuvieron entrenadores argentinos como Marcelo Bielsa, después a Jorge Sampaoli, Claudio Borghi, Eduardo Berizzo, hoy está Gareca. ¿Está de acuerdo a la elección de entrenadores argentinos?
- A Bielsa hay que reconocerle que hizo una gran labor, un gran trabajo en nuestra selección. Borghi ya lleva en Chile 30 años, es un chileno más. Los directivos de la Federación se han inclinado por un entrenador argentino. Bielsa fue extremadamente exitoso, y también Sampaoli. A los demás, las cosas no le han caminado a ninguno.

- ¿De Sampaoli tiene buenos recuerdos?
- Mire, ¿quiere que le diga algo? Efectivamente, los resultados que obtuvo fueron maravillosos. Pero en el mejor periodo de Sampaoli, yo lo criticaba porque no se estaban buscando alternativas para los jugadores que en ese momento estaban dándonos felicidades. En algún momento, iban a empezar a fallar aquellos jugadores por bajo nivel futbolístico, por lesiones, enfermedades y cansancio por tanto viaje. Pero nunca se hizo nada, no se buscaron alternativas y hoy día estamos pagando eso.
- Hay varios argentinos en el fútbol chileno, ¿no?
- Sí, hay varios. Hay algunos que aportan, y otros que definitivamente no marcan absolutamente nada. El futbolista extranjero tiene que superar la media del futbolista local. Cuando había algún futbolista chileno en Argentina era el único o había dos y jugando a gran nivel.
- ¿Cómo lo ve a Carlos Palacios en Boca?
- Ha tenido partidos muy buenos y de los otros también. Yo lo dije cuando él salió de acá e iba a jugar a Argentina, como juega acá en Chile. En su momento, dije que iba a fracasar. Acá tomaba la pelota, recorría treinta metros para dar un pase a dos metros. En Argentina, no te permiten eso, te cortan las piernas. Cuando ha jugado simple en Argentina, ha marcado diferencia. Pero cuando comienza a quedarse con el balón, lo sobrepasan los defensores. Hay otro jugador como Loyola en independiente que esta muy bien, muy bien.
- ¿Su primer partido con Chile fue ante Argentina en 1983?
- Sí, mi primer partido lo jugué contra la selección argentina, efectivamente. Perdimos 1-0 en cancha de Vélez. Fue un muy buen partido, y era mi debut en la selección. Argentina era dirigida por Carlos Bilardo. Tuve la posibilidad del empate en mis pies, pero me ganó en el mano a mano el Pato Ubaldo Fillol.
- ¿Enfrentó a Maradona en ese partido?
- No, no jugó Diego, pero ya lo había visto antes, en otros partidos. Hacía cosas muy importantes dentro de la cancha. Pero por lejos, el mejor jugador del mundo hasta hoy fue Pelé. No jugué contra él, pero mi idolatría siempre ha sido por Pelé
-¿Qué tenía Pelé, que Diego no?
- Pelé tenía todo. Una velocidad impresionante, remataba igual de bien con ambos perfiles no era muy alto, pero era infalible en el juego aéreo. Es decir, era completo, completísimo.