El trasfondo de la inédita ofensiva de EEUU contra el crimen organizado

hace 19 horas 1

Un movimiento similar, pero con un objetivo muy específico, ocurrió cuando la invasión estadounidense a Panamá en 1989 bajo el gobierno George H. W. Bush. En ese momento, el narco-dictador, Manuel Noriega, le declaró la guerra a EEUU, bajo imputaciones de crimen organizado y tráfico de drogas.

En este caso, Trump no sólo apunta al también narco-dictador e ilegítimo, Nicolás Maduro, sino al combate general de miles de toneladas de drogas que entran cada año a EEUU por aire, mar y tierra; procedentes también o con materia prima generada en Asia. Y para eso emplea vastos recursos militares, económicos y de alta tecnología.

La subida de aranceles a México y a Canadá ha sido, entre otras razones, por ese motivo.

“Canadá y México no han hecho lo suficiente para detener los envíos de drogas, en especial las sintéticas, hacia nuestro país. Y a partir de ahora tendrán que pagar un precio”, ha reiterado el presidente Trump.

También ha manifestado lo mismo respecto a China a quien acusa de “proveer recursos necesarios a muy bajo costo para que los cárteles fabriquen las drogas y luego las vendan”.

La Casa Blanca ha acusado a Pekín de actitud irresponsable y dar la espalda a empresas químicas que venden sus productos a los cárteles de drogas en todo el mundo.

Cambio de estrategias

Desde su arribo a la Casa Blanca en enero de este año, el jefe de la Oficina Oval prometió enfrentar el crimen organizado e incrementar al mismo tiempo la seguridad en la frontera sur, además de extender el enfrentamiento a todas las vías que facilitan la fabricación, distribución y comercialización de estupefacientes dentro y fuera de EEUU.

El primer ataque estadounidense en aguas del Caribe contra una lancha con narcotraficantes y drogas a bordo supuso un cambio fundamental de la estrategia antinarcóticos, que pasa de ser una función meramente policial a una ofensiva militar.

Ya son tres ataques hasta el momento. Y continuarán, aseguró la Casa Blanca.

Antes de salir rumbo a Londres en su segunda visita oficial, el presidente Donald Trump anunció el "desmantelamiento" de una tercera embarcación con drogas proveniente de Venezuela y que atribuyó al Cartel de los Soles, sin dar más detalles en su declaración.

El nuevo anuncio de la Casa Blanca ocurrió horas después de asegurar que existen pruebas de que la segunda embarcación destruida el lunes 15 de septiembre en aguas internacionales del Caribe, con tres personas a bordo, transportaba bolsas de cocaína y fentanilo desde Venezuela.

"Con el giro hacia ataques militares en lugar de la aplicación tradicional de la ley para abordar el narcotráfico en la región, la Casa Blanca busca enviar un mensaje contundente", explicó Gustavo Flores-Macías, decano de la Escuela de Políticas Públicas de la Universidad de Maryland.

Ryan Berg, director del Programa de las Américas en el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, dijo que el ataque y eliminación de objetivos" demuestra un cambio en las reglas de enfrentamiento".

"Ya no habrá abordajes de embarcaciones por parte de la Guardia Costera de Estados Unidos: Existe ahora un enfoque mucho más parecido a cómo Estados Unidos elimina a piratas en la región del Golfo, o a terroristas en el Sahel", explicó.

Estados Unidos mantendrá su presencia militar en el Caribe y el régimen venezolano de Nicolás Maduro "deberá tomar decisiones", declaró el jefe del Pentágono, Pete Hegseth, en una entrevista difundida por Fox News.

"No quisiera ser Nicolás Maduro en este momento. Maduro tiene muchas decisiones que tomar. Estamos sentados sobre una isla flotante del poder estadounidense y preparados para usar ese poder para interceptar y destruir a los narcoterroristas que envían drogas a nuestro país", declaró el ahora secretario de Guerra a bordo de un destructor de la Marina estadounidense.

Mensaje a China

La puesta en marcha de esta gran operación de la marina, la aviación y las agencias de inteligencia de EEUU tiene además un mensaje de trasfondo para China:

Hegseth también se refirió al despliegue militar como una respuesta a China, que ha expandido excesivamente su influencia.

"China ha tomado posiciones importantes en nuestro hemisferio. La administración anterior estaba dormida al volante en múltiples aspectos de Centroamérica y Sudamérica (...). No debemos ceder este hemisferio a nadie", indicó el responsable del Pentágono.

El despliegue de la Marina estadounidense en aguas internacionales a escasas millas de Venezuela fundamenta la promesa hecha por el presidente Trump por la seguridad nacional de EEUU y detener las acciones de una narcodictadura ilegítima.

Más de 4.000 marines se encuentran en posición de combate en aguas cercanas a las costas.

La Marina de EEUU confirmó la movilización de los buques de desembarco USS Gravely, USS Jason Dunham y USS Sampson, que forman la poderosa clase Arleigh Burke, lanzada en 1991 y considerada una de las más avanzadas, cuyo diseño “multi-misión” fusiona velocidad superior a 30 nudos, poder de fuego y sistemas avanzados de defensa con poder para neutralizar amenazas aéreas, submarinas o en la superficie.

Estos buques cuentan con radares de última generación para rastrear múltiples objetivos, misiles Tomahawk de ataque a larga distancia, misiles Standard (SM-2, SM-3, SM-6) para defensa antiaérea y antimisiles, misiles antisubmarinos ASROC y capacidad para helicópteros, lo que amplía su radio de acción, y cañón naval Mark 45 de 127 mm y sistema Phalanx CIWS de protección cercana.

La movilización naval incluye también un submarino de propulsión nuclear, el USS Lake Erie y el buque de combate litoral USS Minneapolis-Saint Paul, junto a los buques USS Iwo Jima, el USS San Antonio y el USS Fort Lauderdale.

"Maduro es un fugitivo encausado"

Ante una pregunta de un periodista sobre un comunicado de la Organización de Naciones Unidas que criticó y mostró su desacuerdo por “el uso excesivo de la fuerza marítima militar de Washington” cerca de Venezuela, el secretario de Estado Marco Rubio respondió: “Si las Naciones Unidas está en desacuerdo, a mí no me importa lo que diga Naciones Unidas”.

“Maduro es un fugitivo encausado por la justicia norteamericana. Maduro no es el líder legítimo de Venezuela, recalcó, y enfrenta cargos en el distrito sur de Nueva York por un gran jurado”.

De acuerdo con las afirmaciones de un testigo en el proceso judicial en EEUU contra la narco-dictadura de Maduro y su vínculo directo con el Cártel de los Soles (declarado por Washington como organización terrorista), la finca El Chaparralito -expropiada por el régimen después de que su dueño y ahora testigo se negara a participar en el narcotráfico- es "el centro de acopio del Cartel de los Soles en Apure, un gran corredor del narcotráfico. Toda la droga que sale de Colombia pasa por ese estado, ese el corredor de la droga para que salga hacia Centroamérica, México, EEUU, y Puerto Rico”, aseguró el exganadero y expropietario de la granja, Reyes Hernández.

Hernández acusa además a Diosdado Cabello de ser "el director general del Cartel de los Soles", de acuerdo con una entrevista citada por DIARIO LAS AMÉRICAS. "Ningún envío de drogas que se haga; nada se mueve, nada se hace, si Diosdado Cabello no autoriza”, afirma Hernández.

Dos sobrinos de la esposa del dictador venezolano, Cilia Flores, fueron condenados en Nueva York por tráfico de cocaína.

El 4 de septiembre, dos aviones caza F-16 de la fuerza aérea de Venezuela sobrevolaron el destructor lanzamisiles estadounidense Jason Dunham, un buque de guerra anclado en aguas internacionales. La acción, en la que murieron 11 miembros del nombrado Tren de Aragua, fue catalogada por el Departamento de Defensa como “altamente provocadora”.

El lente de Washington

La acción se produjo dos días después del hundimiento de la embarcación que, de acuerdo con el gobierno de EEUU, transportaba drogas y que había salido de un punto de la costa venezolana como parte de las operaciones contra el narcotráfico.

El lente de Washington se dirige hacia el narcorégimen de Maduro, acusado de liderar el Cártel de los Soles y tener vínculos directos con el Cártel de Sinaloa, responsable de introducir toneladas de cocaína y fentanilo en EEUU.

Ambas bandas del crimen organizado han sido denominadas por EEUU como organizaciones terroristas, bajo una orden ejecutiva firmada por el presidente y Comandante en Jefe Donald J. Trump.

La respuesta del líder republicano fue la siguiente: “Cualquier avión u otros dispositivo que ponga en peligro la operación antidrogas de EEUU y ponga en peligro a la Marina será derribado inmediatamente”. En adición a esa declaración, fueron enviados a Puerto Rico 10 aviones de combate F-35.

“Durante demasiado tiempo, los cárteles y el régimen narcoterrorista de Venezuela han inundado nuestras comunidades con drogas peligrosas, han alentado los delitos violentos en nuestras calles y han puesto en peligro la seguridad pública de los ciudadanos estadounidenses en Puerto Rico y en el resto de Estados Unidos”, afirmó la gobernadora de Puerto Rico, Jenniffer Gonzálezz .

González expresó su respaldo a las operaciones militares de EEUU contra el narcotráfico en el Caribe y acusó al régimen de Maduro y al Cártel de los Soles de inundar a las comunidades de la isla con drogas peligrosas.

¿Eventual acción contra Maduro?

Las señales del Departamento de Defensa de EEUU junto a las declaraciones concisas de Trump y Rubio no dejan muchas dudas sobre una sorpresiva y eventual acción contra el régimen de Maduro, que lo mismo ha lanzado amenazas y desafiado a la Casa Blanca que ha implorado calma y paz en un tono de perdón y miedo.

El narcorégimen de Maduro se mantiene en el poder de manera ilegítima desde 2017, cuando desde el interior del gobierno se organizaron supuestas elecciones presidenciales en las participaron candidatos sin ninguna posibilidad de triunfo.

Todos los candidatos opositores con verdadera fuerza política fueron inhabilitados, perseguidos y encarcelados. La mayoría de los líderes opositores, excepto María Corina Machado y otros que se negaron a salir del país y enfrentar adentro las consecuencias, fue forzada a tomar la vía del exilio político, dejando el camino limpio a Maduro para otra patraña electoral en 2024 a modo de circo.

En julio de 2024, el régimen hizo creer a algunos venezolanos que realizaba “comicios presidenciales libres”, cuando en realidad era otra artimaña para intentar legitimar una vez más mediante el fraude y la coacción su narco-dictadura.

Tras la inhabilitación por parte de Maduro de Corina Machado, fue designado por Vente Venezuela el opositor Edmundo González quien resultó ganador de acuerdo con las actas electorales verdaderas obtenidas por la oposición venezolana.

Como era de suponer, el régimen catalogó las acciones de la oposición de revelar la verdad como un golpe de Estado y el presidente electo Edmundo González fue obligado a abandonar el país. Colaboradores directos de Machado han sido encarcelados o desaparecidos. Como es el caso de Rafael Tudares, yerno del presidente electo Edmundo González, quien fue secuestrado en enero de 2025 por el servicio bolivariano de inteligencia, controlado por la Seguridad Cubana, y luego fue acusado de una serie de cargos sin pruebas.

La mayor incautación de químicos

En la primera quincena de agosto de 2025, Trump -como comandante en Jefe del Ejército de los Estados Unidos- ordenó a la Marina estadounidense, a la fuerza aérea, a las agencias de inteligencia y al Departamento de Seguridad Nacional trabajar de forma conjunta y enfrentar de manera directa y precisa el tráfico de drogas y sustancias que se utilizan en la fabricación de toneladas de estupefacientes sintéticos, que ahora se comercializan con grandes ganancias; muy por encima de las drogas tradicionales como la marihuana, cocaína y la heroína, entre otras.

Como parte de esta gran ofensiva contra el narcotráfico, EEUU reveló el 3 de septiembre la incautación más grande de EEUU de [precursores químicos] utilizados para la fabricación de metanfetaminas y en especial, el fentanilo, causante de cientos de miles de muertes en el país en los últimos cinco años.

Se trató de la confiscación de nada menos que 13.000 barriles con unos 300.000 kg de productos químicos procedentes [de China] y con destino al Cártel de Sinaloa en México, de acuerdo con el primer informe de las autoridades federales.

La fiscal para el distrito de Columbia (Washington DC), Jeanine Pirro, viajó hasta Texas (sur) para realizar el anuncio junto con el director interino del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), Todd Lyons.

Las autoridades federales anunciaron la confiscación de "dos cargamentos de sustancias químicas, transportados en dos buques diferentes en alta mar y enviados al Cártel de Sinaloa en México. Es decir, de China a México.

“El puerto de descarga principal era Shanghai, China, y el de llegada, México", dijo Pirro, desde unos almacenes en la ciudad de Pasadena, al sureste de Houston, Texas, donde se encuentra bajo custodia federal el enorme cargamento.

La operación se realizó una semana atrás del anuncio público y fue el resultado del trabajo conjunto de múltiples agencias federales, la Marina y el Departamento de Seguridad Nacional de EEUU.

Son insumos como alcohol bencílico y N-metilformamida "que se habrían utilizado para fabricar 189.000 kilos de metanfetamina, cuyo valor en las calles de cualquier ciudad como Houston ascendería a [569 millones de dólares]".

Pirro explicó que esta acción fue posible luego de que el presidente Donald Trump y el secretario de Estado, Marco Rubio, declararan al cartel de Sinaloa como una organización terrorista extranjera.

Según Lyons, jefe de ICE, al considerar al cartel de Sinaloa como terrorista, las autoridades federales ahora tienen mayores facultades, como "la capacidad de rastrear" los insumos incluso antes de que lleguen al país.

Piloto retirado de la Guardia Costera comenta

La fiscal Pirro aseguró que "diariamente, toneladas de sustancias químicas utilizadas para crear drogas sintéticas como las metanfetaminas y en especial el fentanilo se envían de China a México en una guerra no declarada de China contra Estados Unidos y sus ciudadanos".

El piloto retirado de la Guardia Costera, John Mixson, aseguró a la cadena Fox News que la política de “mano dura” de Trump representa un cambio necesario ante lo que calificó como un “peligro claro y presente” para Estados Unidos.

El exoficial recordó que el negocio del narcotráfico es un “juego de 50 años” en el que los cárteles han demostrado adaptarse constantemente. Si en el pasado usaban aviones, hoy prefieren las llamadas “lanchas rápidas”, que viajan desde Sudamérica rumbo a México para luego cruzar la frontera con Estados Unidos.

“Sólo necesitan que una de cada cinco embarcaciones logre su objetivo para que sea extremadamente rentable”, explicó.

Detrás de estas operaciones, los cárteles incluso obligan a tripulantes a colaborar bajo amenazas contra sus familias. “Secuestran a esposas, hijas y hermanas, hasta que cumplen con la misión”, señaló Mixson.

Lo que hace la administración Trump para combatir el narcotráfico, y muy probable terminar con la narco-dictadura de Maduro pasó de una promesa de campaña a la mayor actuación de forma conjunta y coordinada de un presidente de EEUU contra los cárteles del narcotráfico que operan ya en muchas regiones del planeta. También representa una clara posición geoestratégica y geopolítica en América Latina frente a la injerencia de China en los últimos 20 años.

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FUENTE: Con información de AFP, The Epoch Times, Washington Examiner, The Western Journal, Europa Press.

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