La inesperada caída del Napoli en la Serie A expuso la tensión con la que conviven dos figuras de fuerte personalidad dentro del club del sur de Italia: Antonio Conte y Kevin de Bruyne.
La derrota ante el AC Milan, que significó la primera desilusión de la temporada para el vigente campeón, no solo supuso un revés deportivo, sino que también dejó al descubierto el carácter del entrenador y el virtuoso volante cuando el estratega decidió reemplazar a la figura con pasado en el Manchester City.
A pesar de sus 34 años y de su salida del combinado británico tras no recibir una oferta de renovación, el belga mantiene intacto su talento. Desde su llegada al equipo napolitano, el club lo ha considerado el referente de un plantel que quiere dar el salto en el ámbito internacional, aunque en la mayoría de los encuentros no ha podido completar los 90 minutos.
Por lo tanto, cuando De Bruyne dejó el terreno de juego a los 26 minutos del complemento debido a la expulsión del ecuatoriano Pervis Estupiñán, su expresión reflejaba un claro fastidio hacia el DT, aunque el incidente no pasó a mayores. A pesar de haber marcado el único gol de su equipo desde con la ejecución de un penal, cuando el marcador estaba en contra por 2 a 1, fue sustituido por Eljif Elmas antes del final. Y su reacción fue evidente: se dirigió hacia el banco de los suplentes negando con la cabeza, visiblemente molesto, sin saludar a nadie y partiendo directamente hacia la zona de los vestuarios.
La actitud del belga no pasó desapercibida y fue motivo de consulta en la rueda de prensa posterior al encuentro. Antonio Conte, conocido por su temperamento y su exigencia, respondió sin rodeos: “Espero que estuviera molesto por el resultado, porque si estaba molesto por otra cosa... se equivocó de persona para enojarse”, declaró el técnico italiano ante los medios. Y completó: “No hay nada más que decir, creo que el cambio fue el correcto”.
Cabe recordar que Kevin De Bruyne fue recibido en el Napoli como el posible sucesor del máximo ídolo de la institución, Diego Maradona. “Es un jugador excepcional que ha sorprendido a todo el mundo. Ha venido aquí para demostrar ciertas cosas”, habían sido las palabras de Antonio Conte durante la pretemporada. Sin embargo, en el último tiempo la producción del ex volante de los Ciudadanos no fue la esperada y el DT no dudó en reemplazarlo. Fiel a su estilo, como la recordada ocasión en la que se enfrentó a Lautaro Martínez cuando estaba al frente del Inter, al entrenador no le tiembla el pulso. Y sus decisiones pueden generar sismos internos dentro de un equipo que quiere hacer historia.