El impacto del “clan Verstappen” en el despido de Christian Horner en Red Bull: “Jugaron un papel clave en su salida”

hace 8 horas 2
Verstappen y el asesor HelmutVerstappen y el asesor Helmut Marko, parte del clan que habría desestabilizado a Horner antes de su salida de Red Bull

El despido de Christian Horner como jefe de equipo de Red Bull marcó un giro inesperado en la Fórmula 1 a pocas semanas del parate más largo de la temporada y varios referentes señalaron una influencia que habría sido decisiva para esa determinación. Martin Brundle, reconocido comentarista de la categoría, sostuvo que el clan Verstappen jugó un papel fundamental en la destitución, que se produjo de manera inmediata tras el Gran Premio de Gran Bretaña y en medio del mal presente de la escudería, que marcha en el cuarto lugar del Campeonato de Constructores y que tiene de la lucha por el título de pilotos

Brundle relató que advirtió una actitud atípica en Horner horas antes del anuncio de su salida, describiéndolo como “muy callado y muy introvertido”, durante un evento en Londres. “Sabía que Horner no era querido por la parte Verstappen y sospecho que estaban bastante involucrados en la decisión”, afirmó en el podcast de Sky “The F1 Show”. El analista recordó las tensiones entre Horner y Jos Verstappen, padre de Max, quien había advertido que “el equipo explotaría” si el británico continuaba al mando tras los episodios de acusaciones e investigaciones que involucraron a Horner en los últimos meses.

Según Brundle, la presión ejercida por el entorno Verstappen escaló en paralelo con la pérdida de apoyo interno a Horner y la salida de figuras clave como Adrian Newey y Rob Marshall. “El campamento de Verstappen estuvo lanzando granadas de mano durante meses y algunas explotaron. Han sido implacables en ese sentido. El padre de Max dejó claro que Horner no debería liderar el equipo. Ellos jugaron un papel clave en la salida de Christian”, afirmó el conocido cronista del paddock, que además consideró que el proceso contra el británico se aceleró tras la muerte en 2022 de Dietrich Mateschitz, el histórico fundador de Red Bull Racing.

El ex piloto que recorre la grilla en cada prueba de F1 también sostuvo que desde la carrera de Bahréin en 2024 se desplegó una campaña de presión mediática y política liderada por el clan Verstappen: “Ellos informaron a periodistas y Horner estuvo cada vez más bajo presión. Han lanzado granadas de mano durante meses, y el padre de Max dejó claro que Horner no debía liderar el equipo. Estuvieron bastante involucrados en la decisión”.

Un abrazo tras el últimoUn abrazo tras el último título en 2024. Esta fue la foto que publicó Verstappen junto a un mensaje de agradecimiento tras la salida de Horner del equipo

El ex jefe de equipo queda fuera después de una etapa en la que Red Bull, pese a algunas victorias recientes y su histórico dominio, experimentó inestabilidad interna y un descenso en los resultados. Horner sumó bajo su gestión 14 campeonatos mundiales y 124 victorias en Grandes Premios. No obstante, la fricción interna y el desgaste político derivaron en la designación de Laurent Mekies como nuevo director general. El ex Ferrari, que estaba al frente del equipo satélite (Racing Bulls), fue nombrado como el reemplazante de Horner al mismo tiempo del anuncio de la salida del ahora ex CEO del equipo con base en Austria.

Más allá de la mirada de Brundle, el periodista Tobias Grüner conjeturó en el medio Auto Motor Sport que “con la marcha de Horner, la amenaza de perder a Verstappen debería, al menos, evitarse por el momento”. En esa misma sintonía, el manager del cuatro veces campeón del mundo difundió un comunicado en medios neerlandeses despegándose del despido: “Esta es una decisión que Red Bull ha tomado y hemos tomado nota de ella. Le corresponde a Red Bull compartir la información de fondo sobre la decisión. En opinión de Red Bull, esta es la mejor manera de proceder. Le corresponde a la empresa matriz contratar personal y tomar decisiones estratégicas. Nada cambia para nosotros. Tenemos contrato con Red Bull y estamos comprometidos, como lo hemos estado durante once años. Nuestro principal objetivo ahora es recuperar el rendimiento. Y rápido. Max quiere aprovechar al máximo el equipo que tiene a su disposición, pero también somos conscientes de que el campeonato ya no está a su alcance”, firmó Raymond Vermeulen, según replicó el portal Formule1.

Más allá de la polémica interna, la salida de Horner abrió un proceso de negociación que sería un impacto económico. Según reveló The Telegraph, el contrato de Horner con Red Bull se extendía hasta finales de 2030, con un salario anual que alcanzó las 8,92 millones de libras en 2023. Esto lo consolidó como el director de equipo mejor remunerado de la Fórmula 1 (sólo superado por Toto Wolff), y deja abierta la posibilidad de que, de cerrarse la liquidación completa del vínculo, la cifra reclamada como indemnización alcance más de 70 millones de euros. Además, existen bonificaciones y otras formas de ingresos contempladas en el contrato.

Para el diario inglés, Red Bull argumenta que en caso de que Horner se sume a otro equipo (se mencionan Ferrari y Alpine), el monto de la indemnización podría reducirse dependiendo de las cláusulas y restricciones de competencia. Por ahora, Horner atraviesa un periodo que se llama “gardening leave”, lo que significa que continúa cobrando su salario, sin facultades operativas, ni posibilidades de negociar activamente con otras escuderías hasta finalizar el proceso de desvinculación y acordar condiciones de confidencialidad. Sky Sports indicó que su regreso a la Fórmula 1 no ocurriría al menos hasta enero de 2026.

Horner quedó fuera del paddockHorner quedó fuera del paddock de la F1. ¿Volverá en 2026 con otra escudería?

Un aspecto que destacó The Telegraph es la solidez de la situación financiera personal de Horner, con un patrimonio estimado en 46 millones de euros según Finance Monthly. Las inversiones inmobiliarias, junto con los ingresos propios y los de su esposa, la empresaria y ex integrante de las Spice Girls Geri Halliwell, elevan la fortuna familiar por encima de los 500 millones de euros.

Durante su gestión, Horner impulsó alianzas comerciales tanto en Red Bull Racing como en Racing Bulls y dirigió una de las etapas competitivas más eficaces, situando al equipo a un paso de la perfección estadística en 2023, cuando solo una victoria (la de Carlos Sainz Jr con Ferrari en Singapur) evitó el pleno de triunfos para la dupla Verstappen-Checo Pérez.

La salida de Horner, fraguada en medio de disputas internas de poder, presiones deportivas y negociaciones contractuales excepcionales, deja a la Fórmula 1 a la expectativa respecto al futuro inmediato del británico y a la escudería de la bebida energizante en un proceso de reconstrucción bajo la influencia decisiva del clan Verstappen.

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