MIAMI.- Un cubano tatuador, que se muestra como un diseñador y artista visual por sus redes, es conocido no solo por su abierto respaldo a las normas represoras de la política castrista, sino también por justificar abiertamente ataques criminales de terrorismo, como el ocurrido en la embajada de Israel en EEUU, el 22 de mayo pasado.
Se trata de Roberto Ramos Mori, quien desde su postura ideológica de izquierda, compartió y justificó por las redes sociales la acción terrorista de Elías Rodríguez, quien asesinó con múltiples balas a Yaron Lischinsky, de 28 años edad, y Sarah Milgrim, de 26 años, empleados de la sede diplomática israelí en Washington D.C, según publicaciones.
“Me alegra que hoy, al menos, haya muchos estadounidenses que lo vean como una manera muy comprensible, y quizás incluso la única sensata, de actuar”, escribió Elías Rodríguez, quien militó en el Partido por el Socialismo y la Liberación.
Lischinsky y Molgrim, quienes estaban a punto de casarse, salían de un evento diplomático realizado en el Museo Judío y organizado por el Comité Judío Estadounidense, cuando Rodríguez, residente en Chicago, los baleó. Y al ser detenido gritó “¡Palestina libre!”.
Cubano a favor del terrorismo
Ramos Mori, en comentarios en sus redes, empleó frases como “la impunidad trae eso” y que por la necesidad que vive Gaza “solo así se le ocurre a alguien llamar criminal a ese muchacho”, según el reporte.
Pero sus redes muestran cantidad de mensajes procastristas, pro palestinos y pro marxistas que muestra con desenfado a través de sus post. Y en su estudio de tatuajes en La Habana acoge eventos de la publicación procastrista La Joven Cuba, afirma.
El cubano castrista también apoyó por sus redes el crimen de Luigi Mangione, de 26 años de edad, quien fue arrestado y acusado por el asesinato de Brian Thompson, CEO de UnitedHealthcare, en Nueva York, en diciembre de 2024. Un hecho que la fiscalía consideró terrorismo y que podría llevarle a la pena máxima.
Más denuncias contra Ramos
Pero contra Ramos Mori no pesan solo estos señalamientos, sino que también es catalogado como violento maltratador de mujeres.
El tatuador, quien fuera un estandarte por los “derechos Lgbtiq” y el Código de “las familias” de 2022, es conocido también como maltratador de mujeres.
La activista izquierdista Mónica Baró fue una de las primeras en señalarlo públicamente como “misógino y maltratador de mujeres”, según la publicación.
A esta víctima se suman otras mujeres, como Beatriz Batista y Claudina Gómez, quienes compartieron experiencias similares sobre sus abusos y comentarios ofensivos catalogados como violencia de género.
Sobre estos hechos se condena “el silencio cómplice” de organizaciones feministas cubanas como “Yo sí te creo” y el “Observatorio Cubano de Género”, que no han emitido pronunciamientos al respecto, dice el reporte.
FUENTE: Con información de cubanosporelmundo,.com