
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Costa Rica realizó este viernes tres allanamientos en la Ciudadela León XIII, en San José, y en Cañas, Guanacaste, donde se capturó a cuatro sospechosos del asesinato del opositor nicaragüense Roberto Samcam.
Entre los capturados figuran una mujer identificada como Chacón Guillén, de 30 años; un hombre de apellido Chaves Medina, de 35 años, considerado intermediario en la operación; un hombre de apellido Robles Salas, de 23 años, señalado como transportista; y un cuarto de apellido Orozco González, de 33 años.
El OIJ aún busca a un joven de 20 años, de apellido Carvajal Fernández, considerado el gatillero que ejecutó los disparos.
El jefe del OIJ, Randall Zúñiga, explicó que “se están deteniendo a los autores materiales del homicidio y a un intermediario costarricense”. Añadió que “el móvil fue un asesinato por comisión o encargo” y que por ahora “no tenemos una vinculación directa con algún gobierno u otro país que no sea Costa Rica”, aunque las investigaciones siguen abiertas.

La viuda de Samcam, Claudia Vargas, reaccionó a las detenciones afirmando: “Hoy estamos un paso más cerca de la verdad, un paso más cerca de la justicia. Se han arrestado a 4 de los 5 implicados materiales”.
También destacó la necesidad de identificar a los responsables intelectuales: “Falta mucho trabajo, conectar a los responsables intelectuales, establecer el móvil político y transnacional”.
Roberto Samcam, de 67 años, perteneció al Ejército de Nicaragua del que se retiró con grado de mayor. Era un fuerte crítico de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, y participó en las protestas ciudadanas de 2018, año mismo en que salió al exilio debido a la represión que desató el régimen nicaragüense.
Samcam fue asesinado el 19 de junio en su apartamento en Moravia, San José, Costa Rica. Recibió múltiples disparos en el tórax, abdomen y extremidades.
En febrero de 2023 fue uno de los 94 nicaragüenses a quienes se despojó de la nacionalidad y se les confiscó sus bienes. Posteriormente obtuvo la ciudadanía española.
El fiscal general de Costa Rica, Carlo Díaz, no descartó un trasfondo político en el crimen. “Una de las líneas de investigación apunta a que esto fue una orden aparentemente del Ejército nicaragüense. No nos vamos a conformar con detener a quienes realizaron la ejecución; vamos a llegar hasta las últimas consecuencias tratando de determinar quiénes ordenaron este homicidio”, declaró.

El caso recuerda al intento de asesinato de Joao Maldonado, también opositor nicaragüense refugiado en Costa Rica, ocurrido en 2022. En ambos hechos hubo seguimientos previos, vigilancias y participación de transportistas privados de la Ciudadela León XIII.
“Existen varios paralelismos entre el intento de homicidio de Joao Maldonado hace ya aproximadamente un año y este homicidio. Son ambos homicidios ejecutados de manera bastante burda, bastante torpe, con gente que no tiene una gran experticia”, señaló Zúñiga.
El asesinato de Samcam provocó preocupación entre los refugiados nicaragüenses en Costa Rica y entre organizaciones internacionales de derechos humanos.
El Grupo de Expertos en Derechos Humanos sobre Nicaragua (GHREN) indicó que “hay información relevante que indicaría motivaciones políticas” detrás del crimen. En Europa, la eurodiputada Diana Riba i Giner advirtió que “este asesinato demuestra que la inseguridad ya no solo está dentro de Nicaragua, sino también fuera de las fronteras”.